Pensar estratégicamente no basta: hay que ejecutar con propósito” - Roberto Yúdice

Graduado, MBA, Financial Advisor, Merit Wealth Advisors, Orlando, Florida, Estados Unidos
 
 
Para Roberto Yúdice, estudiar un MBA era el paso necesario para fortalecer su perfil profesional, especialmente en el área financiera. Con experiencia previa en el sector financiero y una visión clara de crecimiento, entendió que para liderar con impacto necesitaba algo más que conocimiento técnico: debía fortalecer su criterio estratégico, su disciplina ejecutiva y su capacidad para convertir ideas en resultados.

Hoy, como consultor financiero en USA y poseedor de certificaciones tales como como CRPC y APMA reconoce que el MBA de ISEADE representaba una inversión clave para potenciar sus capacidades y abrir nuevas oportunidades de crecimiento.

 

 

1. ¿Qué te motivó a estudiar el MBA de ISEADE y por qué elegiste fortalecer tu perfil en el área financiera?

 
Concluí que cursar un MBA era un paso necesario para fortalecer mi perfil profesional, especialmente en el área financiera. Entendí que dominar esta área era clave para tomar decisiones estratégicas con mayor solidez y visión de negocio.
 

  

2. ¿Cómo describirías la experiencia de cursar el MBA en términos de exigencia, contenido y aplicación práctica?

 
La exigencia del MBA en ISEADE es alta. Requiere compromiso y sacrificio personal. Cada módulo desafía tu capacidad analítica y te obliga a aplicar los conceptos en tiempo real. La aplicación práctica del conocimiento es uno de los mayores valores del programa. No basta con pensar estratégicamente, hay que ejecutar.

 

El contenido del programa es sólido y bien estructurado. Las asignaturas “core” en finanzas son el verdadero núcleo práctico del MBA: manejo de flujo de efectivo, presupuestos, conceptos como valor presente y tasa de retorno, y valoración de proyectos. Estas herramientas son directamente aplicables en el entorno corporativo y fortalecen la toma de decisiones estratégicas. La aplicación práctica del conocimiento es uno de los mayores valores del programa..
 
 

3. ¿Hubo algún módulo, docente o experiencia del programa que haya marcado un antes y un después en tu carrera?

 
Definitivamente, los módulos de finanzas y contabilidad marcaron un antes y un después. Me permitieron fortalecer mi criterio financiero y tomar decisiones con mayor precisión y visión estratégica. El Ing. Francisco Sorto y el Lic. Adilio Alvarenga no solo compartieron conocimiento, sino que también me retaron intelectualmente y me ayudaron a crecer como profesional.
 
 

4. Si resumieras tu experiencia en una frase, ¿cómo describirías el impacto del MBA de ISEADE en tu vida profesional y personal?

 
En resumen, fue el impulso académico que estructuró mi experiencia, fortaleció mi criterio financiero y me enseñó que pensar estratégicamente no basta, hay que ejecutar con propósito.
 
 

5. ¿Qué consejo le darías a un profesional salvadoreño que hoy está considerando cursar el MBA de ISEADE pero aún tiene dudas?

 
– La experiencia: El MBA no solo se trata de aprender, sino de compartir. Tu experiencia profesional es un activo valioso que enriquecerá las discusiones, los casos y el networking.  No esperes tener “todo resuelto” para aplicar. El programa está diseñado para ayudarte a transformar tu “know how”. 
 
– Tu caja de herramientas: El MBA es parte de ella, si no la tienes, no cuentas con todas las herramientas para ser el indicado para resolver o manejar problemas complejos. El mundo cambia rápido. Lo que aprendiste hace cinco años puede estar obsoleto hoy. Un MBA te da acceso a nuevas metodologías, pensamiento crítico, finanzas, marketing, liderazgo y más. Es como pasar de herramientas manuales a tecnología de punta.
 
– Idiomas: El inglés ya no es opcional; El inglés es el idioma Global.

 

La historia de Roberto Yúdice demuestra que el liderazgo efectivo surge cuando el conocimiento se convierte en acción. El MBA de ISEADE no solo fortaleció su criterio financiero, sino que transformó su manera de pensar, comunicar y ejecutar. 
 
“Más allá de la teoría, el MBA te prepara para entender el impacto global de tus decisiones dentro de una organización. El liderazgo es un eje transversal: el mensaje es claro—no basta con pensar estratégicamente, hay que ejecutar. Una lección que aún resuena conmigo es la importancia de trasladar ideas, estrategias e iniciativas en acciones concretas. Tomar la iniciativa y liderar con propósito es lo que marca la diferencia”